Con una participación activa de apoderados, el miércoles 28 de mayo a las 19:00 horas se desarrolló una jornada escolar de motivación dirigida especialmente a estudiantes que se encuentran en situación de repitencia.

El encuentro, a cargo de la coordinación Pedagógica, y que se vivió en un ambiente cercano y reflexivo, buscó ser un espacio de contención y guía para las familias que enfrentan procesos escolares complejos.

Uno de los temas centrales fue la autoestima escolar como base del desarrollo académico y emocional. Se destacó que esta valoración personal se construye desde la percepción que los estudiantes tienen de cómo los ven otros, especialmente sus padres y profesores. En ese sentido, se entregaron estrategias concretas para fortalecer la autoestima desde casa: celebrar pequeños logros, generar rutinas estables y evitar comentarios comparativos que desmotiven.

En el encuentro también se subrayó que asistir a clases no es solo cumplir con una obligación, sino aprovechar cada jornada como una oportunidad real de aprendizaje. La participación activa en el aula, el vínculo con los profesores y la relación con sus pares son pilares que sostienen el proceso educativo. “Los apoderados estaban muy entusiasmados. Hicieron hartas preguntas. Pudieron aclarar sus dudas y eso nos genera mucha satisfacción, ya que vemos un compromiso y una alianza escuela y familia”, señaló Denisse Fuentealba, Asistente Social del COM.

Además, se abordaron las implicancias de la inasistencia escolar, que van desde el rezago académico hasta la pérdida de hábitos y desconexión emocional con el COM. Este fenómeno, muchas veces silencioso, impacta directamente en la autoestima del estudiante y en su percepción del futuro, por lo que la presencia diaria se vuelve un factor protector clave.

Otro de los aspectos más valorados de la jornada fue el bloque dedicado a los hábitos y técnicas de estudio. Se compartieron herramientas, el uso de mapas conceptuales, rutinas de repaso, y el acompañamiento respetuoso de los apoderados en el proceso diario. “Es importante identificar las formas de aprendizaje, ya sea visual o auditiva, y también poder dar tips de métodos de estudio para reforzar y llevarlo a cabo en el hogar”, reflexionó Graciela Ortiz, Psicóloga del COM.

Finalmente, se destacó que este tipo de jornadas son más que capacitaciones: son espacios de encuentro humano. En contextos donde los factores socioemocionales, económicos o familiares pueden amenazar el éxito escolar, el COM cumple un rol fundamental como red de apoyo. Acompañar con sentido, confiar en el proceso y apostar por los jóvenes sigue siendo la mejor inversión educativa.

Finalmente, Mario Bravo, coordinador pedagógico del COM, agradeció la alta participación y motivó a los apoderados a continuar el compromiso con sus estudiantes. “Los motivamos a sacar adelante esta tarea. Es una invitación a trabajar juntos, comprometidos y de manera más responsable por el bien de nuestros estudiantes. El liceo hace todo lo posible para que los estudiantes adquieran aprendizajes y no me cabe duda, que los profesores hacen un esfuerzo todos los días por mejorar estas dificultades”, cerró.