El sábado 16 de noviembre, la parroquia Sagrada Familia del COM fue escenario de una eucaristía llena de solemnidad y emoción. En esta ocasión, 33 estudiantes de séptimo y octavo básico realizaron su primera comunión en un momento especial en su vida de fe. Para cinco de estos jóvenes, el día tuvo un doble significado, ya que recibieron también el sacramento del Bautizo, con lo que oficializaron su ingreso pleno a la comunidad católica.
La celebración fue presidida por el padre Director del COM, Sergio Astorga, quien en sus palabras a los estudiantes los invitó a ser "buenos cristianos y honestos ciudadanos", reforzando así el valor de una formación comprometida con el prójimo y con los ideales Salesianos de don Bosco.
Largo camino de fe
Sin embargo, previo a las Primeras Comuniones, la catequesis del COM de séptimo y octavo básico comenzaron a formarse desde marzo de 2024 durante todos los jueves en la tarde. Allí, padres y madres de los estudiantes, participaron de una serie de reuniones formativas.
Luego, el 8 de noviembre, un poco más de 100 personas, entre papás y mamás con sus hijos, participaron en el Casino Mamá Margarita, de un retiro espiritual llamado “Mi Nueva Alianza”, referido a la alianza que tiene los jóvenes con su familia y con la eucaristía, desde la identidad Salesiana. Al término del retiro, los jóvenes recibieron su Nuevo Testamento, el Padre Nuestro y el Credo, regalados por el COM.
El miércoles 13 de noviembre por la tarde, en tanto, los jóvenes de la Catequesis, junto a algunas mamás, vivieron su Liturgia Penitencial y el Sacramento de la Reconciliación, organizado por el Equipo de Pastoral y los sacerdotes Salesianos que acompañaron este proceso de Confesión de nuestros estudiantes.
Llegó el momento
La misa del sábado 16 de noviembre, cargada de emoción y recogimiento, también resaltó la figura de la Virgen María, en sintonía con el Mes de María que la Iglesia Católica celebra en Chile durante los meses de noviembre y diciembre, resaltando aún más la importante celebración sacramental.
Rodeados de familiares, amigos y educadores, los estudiantes participaron en todos los ritos sacramentales de la Primera Comunión, desde el acto penitencial hasta la recepción de la eucaristía, símbolo de su crecimiento en la fe y compromiso espiritual. Los familiares, muchos con lágrimas en los ojos y sonrisas de orgullo, acompañaron a sus hijos en esta significativa ceremonia, expresando gratitud y alegría por su paso en la vida religiosa.
A nivel educativo, el COM mantiene una tradición de acompañamiento espiritual que promueve el desarrollo integral de sus estudiantes, y esta ceremonia es un reflejo de ese compromiso. La comunidad valora profundamente este tipo de instancias, que no solo fortalecen la fe, sino también los lazos con las familias y consolidan los valores de respeto, solidaridad y fe en la formación escolar.
La ceremonia de Primera Comunión y Bautizo representa un primer paso en su camino de fe, una experiencia que, sin duda, acompañará a estos jóvenes en los años venideros, reforzando la misión de educar en la fe y en valores, inspirando a los jóvenes a vivir su espiritualidad en cada etapa de sus vidas a la luz de don Bosco.
Para Fabrizio Martínez, Encargado de Pastoral Sacramental del COM, este signo es muy importante, ya que “es cumplir con uno de los pilares fundamentales de los Salesianos como es la eucaristía como alimento de vida, alimento de fe. Este alimento no se puede perder y es parte también de la formación Salesiana y en ello, los jóvenes, especialmente los de séptimo y octavo básico, junto a sus padres, confían en la enseñanza del Equipo Pastoral, como también de la institucionalidad que entrega el COM para los jóvenes que están en este sacramento”, evaluó.