Durante los días 24 y 25 de octubre y a través de cuatro módulos online, los asistentes de educación del COM revisaron aspectos claves sobre la prevención de abusos, reflexionaron sobre sus roles como educadores y trabajaron en estrategias para promover ambientes sanos y seguros para estudiantes y personal educativo.

El primer día arrancó con un trabajo colaborativo e interactivo, donde los participantes, mediante un ejercicio virtual, identificaron 15 términos relacionados con la prevención de abusos, lo que sirvió para activar el conocimiento y preparar el terreno para los siguientes módulos.

Sanación y prevención

El primer módulo, a cargo de la psicóloga Anita Ortiz, se enfocó en analizar la realidad de la Iglesia ante los abusos sexuales, recordando el mensaje del papa Francisco, quien ha situado a Jesús como el eje central en la sanación y prevención de estos problemas. Los participantes también abordaron cómo acoger denuncias y actuar con sensibilidad pastoral, además de reconocer los tipos de abusos y las respuestas canónicas y legales disponibles.

Este primer módulo concluyó con una revisión de los desafíos locales e internacionales en la prevención de abusos, lo que permitió contextualizar la importancia del trabajo realizado dentro de las comunidades educativas.

Realidad en el mundo

En el segundo módulo, el psicólogo Gonzalo Peralta tomó la palabra y profundizó en la detección de abuso sexual, explicando sus definiciones, tipologías y contexto en el entorno familiar. También se abordó cómo las tecnologías digitales, aunque útiles, pueden convertirse en factores de riesgo. En este módulo, Peralta destacó la necesidad de que los educadores y padres de familia mantengan una mirada atenta sobre el comportamiento de los jóvenes, fortaleciendo el rol preventivo de cada uno en el entorno educativo.

Justicia y reparación

El segundo día de trabajo, estuvo dirigida por el sacerdote David Albornoz, quien, en el tercer módulo, exploró la prevención de delitos sexuales desde la perspectiva canónica. En este espacio, Albornoz explicó cómo la legislación eclesial aborda los abusos y cuál es su enfoque para proteger a las víctimas, promoviendo justicia y reparación. Comparó también la legislación canónica con la normativa nacional, destacando que ambas deben operar en conjunto para asegurar una respuesta eficaz y contundente ante cualquier denuncia.

La prevención hoy

Para cerrar el curso, el cuarto módulo, también guiado por el padre David Albornoz, se centró en promover una visión proactiva de la prevención. Resaltó modelos de prevención utilizados en diversas instituciones, enfatizando la importancia de fomentar ambientes de respeto y de dignidad para todas las personas. El padre David proporcionó directrices para crear espacios seguros y respetuosos, subrayando la importancia del buen trato en la vida escolar y la formación en la detección temprana de abusos. Asimismo, se ofrecieron pistas prácticas para que niños, adolescentes y adultos puedan construir una comunidad educativa basada en el respeto y la seguridad.

Voces agradecidas

“El curso me pareció excelente, entretenido, se habló de muchas cosas importantes, y lo que más rescato es a uno le enseña como auxiliar, como mamá, así que a mí me fascinó”. Marisol Valdebenito.

“Esta charla se debería dar a todo el mundo, no solo a nosotros, sino que a los padres también. Lo que más me llamó la atención fue con la franqueza que se hablaron los temas”. Osvaldo Oyarce.

“Estamos siempre en la línea de la prevención, de ver los riesgos que tenemos en el colegio también, estamos súper atentos, y también a la prevención en cuanto a la agresividad. Estanos siempre atentos en los cuidados de los niños, más que nada, y la tarea es articular papás y casa, casa-colegio”. Señorita Cecilia Figueroa, Rectora.