Con una alta interacción y un ambiente de profunda reflexión, el jueves 26 de septiembre, la “Fundación para el Crecimiento Matrimonial”, realizó una charla enfocada en fortalecer el apego, la comunicación emocional y los lazos familiares en los matrimonios.
La jornada reunió a seis matrimonios, apoderados del COM, quienes participaron activamente en dinámicas interactivas que buscaron poner en común tanto las experiencias positivas como los desafíos que han enfrentado a lo largo de sus vidas matrimoniales.
Uno de los temas centrales de la jornada fue la diferencia entre conversar y comunicarse en el matrimonio. Marcelo Alarcón, expositor de la charla, explicó que, mientras la conversación es un intercambio de palabras, la verdadera comunicación involucra una conexión más profunda y emocional, donde las parejas no solo escuchan, sino que también se comprenden mutuamente. Este punto generó un intenso intercambio de opiniones entre los asistentes, quienes compartieron ejemplos prácticos de cómo una mejor comunicación ha transformado sus relaciones.
“Los lazos más profundos en la vida se tejen desde la comunicación de las emociones y nosotros estamos al servicio de ello. Destaco el interés de los matrimonios por participar, por abrirse, por compartir sus experiencias y creo que puede ser la puerta de entrada para una colaboración todavía más rica entre la Fundación y el mundo Salesiano y sus colegios”, precisó Marcelo Alarcón.
La charla culminó con una invitación a los matrimonios a aprender a diferenciar las emociones, de los juicios de valor y sentimientos, en base a una buena intimidad emocional, abordada desde tres aristas clave:
- El rol de las emociones, entendiendo cómo impactan en la relación y cómo gestionarlas de manera constructiva.
- La disposición a establecer una intimidad emocional, promoviendo un ambiente seguro y confiable para compartir sentimientos.
- Aprender a comunicar las emociones, desarrollando herramientas para expresarse de manera efectiva y comprensiva.
Los matrimonios asistentes destacaron lo enriquecedor del espacio, valorando tanto el contenido entregado por los expositores como la posibilidad de interactuar y compartir con otras parejas. “Fue un espacio donde se pudo compartir diferentes opiniones, puntos de vista, debatir; y eso es bueno. Rescato de la actividad la dinámica, el compartir en el grupo de una manera diferente. Estuvo muy entretenido, muy ameno y me encantó”, señaló Carlos Alberto Donaire.
La jornada fue descrita como un momento clave para reforzar el compromiso y la conexión emocional en el matrimonio, sembrando bases sólidas para el crecimiento conjunto. “Es importante poder darse cuenta de lo que uno ha aprendido en el tiempo, lo que uno puede expresar, el poder decir lo que uno siente y el poder darle la posibilidad a la otra persona de empatizar con ese sentimiento. Creo que el taller está bien enfocado en ese sentido, en el hecho de poder reconocer las emociones, de saber que las emociones no tienen que ser una carga negativa o positiva, sino que son emociones, y que son válidas sentirlas, sin perjuicio de que uno tome ciertas decisiones”, cerró Rose Muñoz.